El Museo Guggenheim Bilbao presenta “Hay una ley, hay una mano, hay una canción” de la artista y cineasta Alex Reynolds, conocida por su constante exploración de nuestros modos de relación y afecto. La muestra presenta tres de sus trabajos más recientes; La mano que canta, 2021, realizada en colaboración con la coreógrafa sueca Alma Södeberg. La película Palais, 2020, rodada en el Palacio de Justicia de Bruselas y la tercera obra de la instalación, Justine, 2020, que consta de un diapasón que vibra en el aire de manera ligeramente perceptible.
La mano que canta (2021). Es su última película, y se podría confirmar que ha sido una de las más costosas en cuanto a proceso de grabación, debido a la situación actual en la que nos encontramos. Realizada de forma colaborativa con la coreógrafa sueca Alma Söderberg, el filme se compone de gestos, voces e imágenes conectados en el tiempo. El contraste de las diferentes escenas – la recogida de la corteza del alcornoque en Extremadura y el intercambio de palabras en español y en inglés. Palais (2020), rodada en el Palacio de Justicia de Bruselas, son 34 minutos de arquitectura donde se puede observar un recorrido entre los pasillos y oficinas del edificio del siglo XIX. Entre un silencio absoluto, se apropia del protagonismo los pasos solitarios de la persona que graba, el chirrido de las puertas y las voces marginadas de fondo, provocando terror y humor a su vez.

Alex Reynolds y Alma Södeberg La mano que canta, 2021 Vídeo en alta definición, en color, con sonido, 22 min Cortesía de las artistas y de la galería Marta Cervera, Madrid © Alex Reynolds y Alma Södeberg

Alex Reynolds y Alma Södeberg La mano que canta, 2021 Vídeo en alta definición, en color, con sonido, 22 min Cortesía de las artistas y de la galería Marta Cervera, Madrid © Alex Reynolds y Alma Södeberg
Justine (2020) trata de un instrumento metálico en forma de horquilla utilizado para afinar instrumentos musicales, llamado diapasón. Reynolds ha conseguido su objetivo, reproducir una frecuencia que recuerde a la voz de Justin (una persona cercana al artista) en un momento determinado, con una fabricación minuciosa y perfecta para que ésta se encontrara presente de manera no figurativa.
Tres piezas que son un ejemplo de como el cine puede ser una herramienta de modificación de las estructuras tradicionales de los relatos visuales.

Alex Reynolds Justine, 2021 Diapasón personalizado, electrónica, acero y madera Cortesía de la artista y de la Galería Marta Cervera, Madrid © Alex Reynolds

Alex Reynolds y Alma Södeberg (alcornoque) La mano que canta, 2021 Vídeo en alta definición, en color, con sonido, 22 min Cortesía de las artistas y de la galería Marta Cervera, Madrid © Alex Reynolds y Alma Södeberg

Alex Reynolds Palais, 2020 Vídeo en alta definición, en color, con sonido, 34 min Cortesía de la artista y de la galería Marta Cervera, Madrid © Alex Reynolds