El Fotomuseum Winterthur (Suiza) presenta la muestra “Women War Photographers – From Lee Miller to Anja Niedringhaus” Se trata de una muestra dedicada al trabajo de fotoperiodismo desarrollado por mujeres en guerras y conflictos internacionales. La exposición cuenta con má de 140 imágenes tomadas entre 1936 y 2011 por mujeres fotoperiodistas: Carolyn Cole (* 1961), Françoise Demulder (1947–2008), Catherine Leroy (1944–2006), Susan Meiselas (* 1948), Lee Miller (1907–1977), Anja Niedringhaus (1965–2014), Christine Spengler (* 1945) y Gerda Taro (1910-1937).
Sus imágenes proporcionan una visión fracmentada de la compleja realidad de las guerras, y que abarca una gran variedad de escenarios militares desde la Guerra Civil española, la Segunda Guerra Mundial y la guerra de Vietnam a los conflictos internacionales más recientes en los Balcanes, Afganistán, Iraq y Libia.
La muestra, reflexiona sobre el porque la fotografía de guerra es un mundo totalmente dominado por los hombres. Los fotógrafos masculinos como Robert Capa o James Nachtwey dan forma a la imagen pública de los conflictos militares. Por el contrario, la larga historia de las mujeres fotógrafas que trabajan en zonas de conflicto aún no se ha rastreado ni mostrado.
A pesar de que la puesta en escena y las estrategias narrativas de las fotógrafas no difieren de las de sus compañeros masculinos, las mujeres han tenido que ganarse a pulso su posición en la línea del frente y operar fuera de las estructuras previstas para ellas. Estas pioneras han jugado un papel clave en la configuración de nuestra imagen sobre la guerras.
Por otro lado, en algunas regiones y entornos culturales, su género también les ha otorgado privilegios negados a sus compañeros hombres, ellas logran llegar a las familias y a las personas afectadas en los conflictos. Esto les ha permitido captar una imagen matizada de los efectos de la guerra en la población civil. Muchas de sus fotografías reflejan la dimensión humana de la guerra de una manera sensible, pero directa.
Existen grandes diferencias entre sus obras. Gerda Taro (1910–1937) se hizo un nombre rápidamente gracias a sus imágenes enfocadas en civiles, especialmente mujeres y niños; y fue la primera fotógrafa en el frente. Mientras tanto, Susan Meiselas fue una de los primeros fotógrafos en poner en juego el color, generando una gran controversia sobre la “estetización de la guerra”. Desde Lee Miller hasta Anja Niedringhaus, sus miradas dudan entre mantener la distancia objetiva, y la simpatía personal. Esto da como resultado imágenes íntimas sobre la vida cotidiana en medio del conflicto, así como ser testigos de las atrocidades cometidas durante los grandes conflictos armados.