Casi siempre es en las malas experiencias en las que ocupamos más aire, más del que en esta atmósfera tenemos. He experimentado esto muchas veces; momentos de desesperación, ira, frustración y muchas otras malas conductas que se forman por momentos que nunca hubiesen sido esperados.
El aire, literalmente, es el elemento primordial para todo ser. Es el amigo silencioso, es aquel del que siempre obtienes algo que te hace continuar o detenerte. A veces, los momentos por los cuales transcurren los hechos son los que marcan el final de una historia o situación determinada, independientemente de cómo haya sido el desenlace. Momentos inconclusos, marcando aquellas malas experiencias en las cuales el aire es nuestro ingrediente decisivo.
DXI47 AIR/AIRE Primavera 2013