MAT COLLISHAW. Una frontera resbaladiza entre lo poético y lo morboso.

M77 Gallery (Milán) presenta “Alluvion”, una muestra dedicada a la obra del artista e intelectual británico Mat Collishaw, comisariada por Danilo Eccher, el titulo de la muestra hace referencia al paisaje que queda tras haber sido modelado por un hecho natural, habla del material depositado por las inundaciones, así como los medios digitales inundan nuestra vida cotidiana y cambian las coordenadas sociales a través de las cuales gestionamos la comunicación, haciéndonos dependientes de un mundo cada vez más mecanizado y controlado por la tecnología, un concepto que encontramos en la mayor parte del trabajo de Collishaw.

Adoptando un enfoque museístico, la exposición se centra en las ambigüedades que caracterizan la obra de Collishaw, quien concentra su poética en las infinitas formas de percibir las imágenes para crear obras capaces de cautivar la atención del espectador con su belleza, solo para conducirlo por los lugares más oscuros de su imaginación.

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All Imaginary Wisdom © Mat Collishaw

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That incomprehensible Clarification © Mat Collishaw

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Every Sweet Endowment © Mat Collishaw

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“Alluvion” de Mat Collishaw en M77 Gallery. Foto: Lorenzo Palmieri

“Las flores tienen esas formas hermosas que nos encanta mirar, pero la razón detrás de su belleza es atraer mariposas y otros insectos con el fin de diseminar el polen. Por lo tanto, las flores manipulan a los demás con su llamativa apariencia física. Por lo tanto, su belleza existe únicamente por razones egoístas, un hecho que encuentro fascinante”, – Mat Collishaw, 2018. Para Collishaw, la belleza no siempre significa verdad y bien: por el contrario, puede estar implicada en el mal.

Así es como el artista, máximo exponente de YBA (Young British Artists) afamado por su desconcertante imaginación visual, introduce al espectador en su escenario multiperceptivo y sensorial, en el que conviven la vida y la muerte, la luz y la sombra. Establece este encuentro, este diálogo entre sus obras y el público, en una frontera estrecha y resbaladiza entre lo familiar y lo impactante, lo poético y lo morboso.

La muestra reúne más de 25 obras de Collishaw en una especie de narración que tiene la dimensión y la sensación de una exhibición de museo. Fotografías, pinturas y obras en 3D nos dan una idea de la producción más significativa de un artista cuyos temas centrales son la ilusión y el deseo. Son accesibles e inmediatos, fáciles de entender para el público, compactos y simples a primera vista pero densamente estratificados en su interior.

Una de las obras más significativas expuestas es The Machine Zone, una instalación de pájaros robóticos que reproducen un algoritmo de acciones repetitivas. Esto se refiere a experimentos realizados en la década de 1850 por el psicólogo estadounidense BF Skinner, quien analizó el comportamiento de pequeños animales bajo el estímulo de un sistema de recompensa, mostrando que una recompensa casual crea una especie de incertidumbre constante que fomenta un ciclo de comportamiento, un mecanismo que también es la base de los algoritmos que guían las interacciones en las redes sociales. Una vez más, la crítica del artista a los medios digitales está viva en su obra.

Las polémicas imágenes originales que aparecen en las pinturas Palantir de Collishaw son fotografías de visión nocturna tomadas durante el confinamiento, cuando reinaba el silencio en el exterior y el ruido lo proporcionaban los medios digitales. Las pinturas, como nuestros registros en línea, capturan un momento fugaz y furtivo de inquietud, un registro sombrío del depredador y su presa.