LABoral Centro de Arte arranca temporada con la instalación inmersiva “El mundo es bosque”, una propuesta de Rotor Studio (Ángeles Angulo y Román Torre) para los 700 m2 de la Sala de Proyectos de LABoral Centro de Arte de Gijón. En esta exposición, una civilización extraplanetaria, inspirada por los bosques asturianos, intenta recrearlos desde la distancia a través de los datos de los que dispone. La falta de condiciones ambientales y biológicas que hacen de la Tierra, y en especial de sus bosques, ecosistemas únicos difíciles de imitar, les enfrenta a un extraordinario desafío.
El mundo es bosque invita a los visitantes a convertirse en exploradores de un bioma desconocido en un mundo fantástico.

El mundo es bosque / El mundu ye viesca. Foto: Marcos Morilla.
El título de la obra está inspirado por el libro “El nombre del mundo es Bosque” de Ursula K. Le Guin, una escritora que revolucionó la ciencia ficción por medio de una hibridación literaria con otros campos del conocimiento como la antropología o la ecología. En sus novelas, la autora aborda temáticas como el feminismo, la otredad, el colonialismo y las utopías ambiguas sobre otras formas de organización y de relacionarnos con la naturaleza. Pensar el mundo como un bosque es hoy más importante que nunca: un bosque que nos acoge, que está en peligro, y que es preciso proteger.
Como los libros de Le Guin, El mundo es bosque invita al extrañamiento, la exploración y la curiosidad; a la imaginación y la fantasía como vías para vislumbrar realidades mejores desde mundos ficticios. La exposición ha sido comisariada por Pablo de Soto y cuenta con la colaboración del artista Diego Flórez en la concepción sonora del espacio. La obra une diseño industrial, arte y medios digitales.

El mundo es bosque / El mundu ye viesca. Foto: Marcos Morilla.

El mundo es bosque / El mundu ye viesca. Foto: Marcos Morilla.

El mundo es bosque / El mundu ye viesca. Foto: Marcos Morilla.