Circula, es obra del diseñador polaco Tomek Rygalik, un banco que nace con un importante valor simbólico, pensado para promover el diálogo y fomentar la interaccion social. Circula es una solución experimental diseñada para reducir el aislamiento social y fortalecer los lazos sociales, que en los próximos meses puede apoyar eficazmente la recuperación del distanciamiento social. El concepto basado en principios que giran en torno a la iniciativa ECO Solidarity, que fomenta ideas de sostenibilidad y economía circular, aboga por un enfoque de diseño ecológico y más centrado en el ser humano. Circula busca integrase en el espacio público y pertenecer a la comunidad.
El objetivo principal de Circula es fomentar el diálogo y las relaciones: ¿qué mejor forma podría tomar que un círculo? Una figura geométrica perfecta, sin principio ni fin. Un símbolo universal de equilibrio y armonía que une a las personas de forma natural. El círculo anula todas las jerarquías y divisiones. Sentarse en círculo nos permite mirar a todos a los ojos, expresarnos mejor y conocernos mejor. Nos hace más abiertos a los demás y apoya la inclusión. Fomenta el compartir y estimula el flujo creativo. Circula es una solución creada para impactar a la humanidad directamente a través de herramientas de diseño. La intención del proyecto es desarrollarse en varias direcciones, incluso impredecibles, para llegar al mayor grupo posible de personas con el fin de apoyar la necesidad de unión y cooperación.
REDONDO EN NOMBRE Y FORMA
Circula es la síntesis estilística y conceptual de la circularidad del diseño. Fabricado con materiales duraderos y sostenibles, el banco está diseñado para recuperarse, reintegrarse y resistir el paso del tiempo. Existen tres versiones diferentes, una madera de abeto o pino, una con plástico reciclado y otra con acero fosfatado. La versión de plástico está hecha a partir de envases reciclados y fue desarrollado en colaboración con Boomplastic, un estudio creativo dedicado al reciclaje de plástico. El plástico reciclado permanece parcialmente transparente para resaltar los fragmentos toscos y coloridos suspendidos en su interior.
“Los humanos son criaturas sociales. Ese hecho contiene tanto el problema como la solución a nuestra crisis actual”, dice Tomek Rygalik.